Junji Ito nos invita a dar un paseo por ese infierno tan personal que ha creado a lo largo de su extensa carrera como autor de manga.
¿Qué es el miedo?
¿Correr hacia el andén de una estación, pensando que hemos perdido nuestro tren? ¿Esperar los resultados de un inesperado examen médico? ¿Escuchar los pasos de alguien a nuestra espalda en un callejón abandonado? ¿Una llamada telefónica en la que solo oímos una extraña respiración? ¿El solitario goteo de un grifo en mitad de la silenciosa noche? ¿Notar el roce de un cuerpo en tu cama cuando sabes que estás durmiendo solo?
Todo esto y mucho más es esa sensación, que se convierte en una labor muy compleja cuando queremos trasmitirla a través de una obra artística, léase relato, novela, película o, como en este caso particular, un cómic, un manga.
Es por ello que el mérito del autor japonés Junji Ito es inmenso, ya que además ha contado con el hándicap de moverse mayormente en un género, el terror, en el que ya se ha hecho prácticamente todo, sabiendo crear un sello único, una mirada muy especial a esos rincones que solo podemos atisbar a través del rabillo del ojo.
Una larga carrera como la suya merecía un gran homenaje, y si hace pocos meses disfrutábamos en nuestro país con la publicación del volumen que conmemora sus treinta años delante del tablero de dibujo (Junji Ito. Estudio desde el abismo del terror) ahora llega un magnífico libro de arte, catálogo, en el que el propio Ito ha realizado una minuciosa recopilación de sus obras más características y personales, logrando un mosaico en color y blanco y negro en el que vamos a zambullirnos de nuevo en su particular universo, desde el comienzo de su carrera hasta la actualidad (1987-2019).
Los que ya conocéis y habéis disfrutado de su obra, que ha sido publicada en nuestro país por ECC en su mayor parte, os vais a regocijar al reencontraros con la belleza hecha maldad, o lo que es lo mismo, una de las más famosas creaciones del autor, Tomie.
A través de diferentes ilustraciones, la mayoría inéditas hasta ahora, observaremos desde distintos ángulos la pérfida belleza de la joven que trajo de cabeza a todo aquel incauto que caía enamorado a sus pies.
Pero si hay una palabra que define la obra de Junji Ito es Uzumaki, una auténtica pesadilla en espiral, en la que lo desconocido, lo grotesco, se presenta de repente en la vida de los protagonistas, siendo ésta a mi parecer, la mejor (y ya es decir) obra del mangaka.
El paseo no termina aquí, más bien todo lo contrario, ya que llegaremos a una de las partes más interesantes de este catálogo, este art book, en la que el autor nos tiene preparado un grupo de ilustraciones, portadas, estudios sobre personajes que van desde bellas jóvenes que no sospechan que el terror se va a cernir sobre ellas cuando menos lo esperen, imágenes que nos traen al recuerdo sus escalofriantes relatos cortos o homenajes gráficos a autores admirados por Ito, como el escritor norteamericano H.P. Lovecraft.
Por si esto no fuera suficiente, para todos aquellos que pasáis horas dibujando, el propio mangaka hace un comentario de la elaboración técnica de todas y cada una de las piezas incluidas en el catálogo, y como colofón, una entrevista en la que habla sobre sus influencias, o ya en un terreno más técnico, los materiales preferidos para dibujar, el conflicto entre lo analógico y lo digital, etc.
No temáis, tras la engañosamente simétrica portada de este libro se esconde un mundo del cual, una vez accedáis, no seréis capaces de marcharos jamás.
¿Seguís sin saber qué es el miedo? Fácil respuesta. Tiene nombre y apellidos, Junji Ito.
Junji Ito Artwork: Mundo Grotesco
Autor: Junji Ito
Tapa dura
Color y B/N
152 págs.
25 euros
ECC Ediciones