Enfrentada a un monstruo al que no puede vencer, perseguida por una psicópata… ¿Tal vez este sea uno de los peores momentos en la vida de Erica Slaughter?
Y es que resulta que el duplicitipo que se mueve por el pueblecito de Tribulation es la especie más letal, y cuanto más lo hieras más fuerte se hará. Para colmo de males, ha adoptado el cuerpo de Erica, por lo que las sospechas del sheriff del lugar, Carter, señalan hacia la rubia protagonista.
Es por ello que la única que puede hacer morder el polvo a esa pesadilla con piernas es Gabi, la rebelde muchachita que, como otros protagonistas de esta serie, lo ha perdido todo, fue testigo del asesinato cruel de su familia.
La única que le une a su pasado, borrado de un plumazo, es Riqui, la pareja de su hermana. Y junto a ella, no sin gritar y quejarse, la jovencita, tendrá que ejecutar un ritual de atracción para que el monstruo se acerque al lugar donde ella dos y Erica la estarán esperando para borrarla de la faz de la Tierra.
Contando así parece fácil, ¿verdad?
Pues para nada, ya que la condición de fugitiva de Erica hizo que el jefe de su casa, el Gran Dragón, permitiera que un operativo de la Casa Cutter, la filial británica, se ocupe de ella. Lo malo es que esta mujer, temida y evitada por todos, es una auténtica psicópata que se deleita con el dolor y la muerte de los demás, dándole bastante igual las especiales características de la amenaza que ha traído el horror a esta pequeña localidad.
La aparición de Cecilia desde la Casa Slaugther, hará que Erica tenga que recordar momentos de su juventud, cuando aún Jessica, su instructora, Aaron y Gary aún estaban vivos. Estos recuerdos traerán el dolor a la chica, pero a la vez harán que con la cabezonería que la caracteriza trate de darlo todo cuando llegue el temido momento del cara a cara con esa versión suya tan escalofriante que nadie, ningún adulto, puede ver…
Pero como y hemos sabido en anteriores entregas, en este mundo tan oscuro, para conseguir algo, primará el sacrificio, lo que deja unas temidas cuentas pendientes.
En esta séptima entrega, el equipo creativo tras este titulo, James Tynion IV, Werther Dell´Edera y Miquel Muerto, vuelve a demostrarnos porque este es uno de los mejores cómics que se están publicando en la actualidad.
Con una trama nacida de la imaginación de Tynion IV, uno de los guionistas más seguidos del momento, que nos tiene agarrados por el cuello desde su ya lejano comienzo, en la que el terror, el drama, la violencia y la acción se mezclan de una manera magistral; un aspecto gráfico espectacular, cortesía del tándem formado por Dell´Edera y el colorista Miquel Muerto, que nos llevan de una página a otra sin darnos apenas cuenta, hasta llegar al temido final, en que desesperamos, rogando porque el próximo volumen llegue lo antes posible a nuestras manos.
Y ya os adelanto, para poneros los dientes largos, que en el octavo tomo de esta serie vamos a hacer, digamos, un particular viaje en el tiempo, donde se nos van a revelar aún más secretos sobre su protagonista, la simpar Erica Slaughter.
Hay algo matando niños Vol. 7
Guion: James Tynion IV
Dibujo: Werther Dell´Edera
Color: Miquel Muerto
Tapa dura
Color
152 págs.
18,95 euros
Planeta Cómic